Circulo mágico
Saludos mi Tribu y abrazos de luz a todos.
El Post de hoy es realizado con el propósito de concretar mi punto de vista e insistencia constante sobre un tema importante en la magia y la hechicería, en este caso, es el uso debido del Circulo mágico, o Circulo ritual.
Bien esta no es una práctica popular, ni tampoco es obligatoria, no deja de ser recomendable, especialmente para principiantes y no iniciados en la práctica, aquellos que carecen de cierta experiencia con respecto al tema.
Es normal cuando se ha leído uno o dos libros esotéricos, creerse un experto que lo sabe todo y está preparado para todo, pues muchas veces los verdaderos practicantes del arte mágico no colocan las suficientes advertencias en sus libros, pues muchas de estas explicaciones pueden parecer a simple vista, extraídas debidamente de un libro de ciencia ficción, y debido a que muchos lectores inexpertos pueden creerlo como algo exagerado, es normal que muchos autores no coloquen las suficientes advertencias, pues si quieres que tus libros sean tomados en serio, lamentablemente debemos limitar incluso la misma realidad hasta un cierto punto.
En todos y cada uno de mis libros siempre he recomendado con notable insistencia el uso y creación del circulo mágico, usualmente con una larga y detallada explicación, e incluso en uno de mis más recientes libros “The Magical Art Of Crafting Charm Bags”, así como en los libros anteriores a este, decidí incluir para la comodidad del practicantes, diferentes formas y usos del circulo de encantamiento, incluyendo un método corto y un método completo.
En cierta ocasión alguien me contestó en alguna red social “no siempre se dispone del tiempo para fabricar un circulo mágico, muchas veces asistimos a la magia por emergencia”, pues mi punto de vista, intentando ser respetuoso al respecto, siempre se dispone del tiempo, realizar un circulo con sal o alguna hierba encantada no te va a tomar más de dos minutos, estemos claros en algo, son dos minutos, es literalmente hallar la sal, alguna hierba de proteccion, flores, o incluso una cuerda previamente consagrada que mantengas en tu altar y puedas utilizar en ciertas ocasiones, por todos los Dioses, son dos minutos!, No creo que existan excusas para decir “no disponía de dos minutos para marcar un pequeño circulo en el suelo”.
Pero como diría mi madre “cuando por pereza o arrogancia no se quieren hacer las cosas, cualquier excusa suena válida”.
Segundo, cuando se dice “hacemos magia de emergencia”, esa “magia de bolsillo” o “magia instantánea” de la cual muchos son muy seguidores ahora, entiendo que el mundo, y especialmente para los fanáticos de las series televisivas de ciencia ficción, es genial imaginar que todo a nuestro alrededor debe suceder sumamente rápido y que debemos realizar “magia instantánea” casi para cualquier cosa.
Pero a menos que estés siendo perseguido por un vampiro a mitad de la noche, no creo que ninguna emergencia merezca realizar un efecto mágico contraproducente. Un efecto mágico contraproducente es ese resultado que ocurre cuando realizas algún hechizo o encantamiento sin pensar debidamente en las consecuencias del mismo (un hechizo de amor por ejemplo), y luego este resulta tomar un efecto que no es propiamente lo que estábamos esperando, la magia siempre funciona, pero funciona de dos maneras, o funciona bien, o funciona mal, pero la energía que enviamos a nuestro alrededor siempre acabará por producir algún efecto, bien sea positivo o negativo, pero siempre resultará en algo.
Un circulo mágico funciona primordialmente como una forma práctica de protección, mantendrá la energía dentro del circulo y reutilizara tu propia energía contenida en el circulo para protegerse debidamente de energías externas, además, es una forma de enfocar rápidamente la energía sin distracciones externas, pues tu mente y tu sistema límbico entran en modo “estoy realizando un hechizo y debo centrarme”, y al cabo de algún tiempo de práctica, esto acaba resultando muy positivo, pues nos ayuda a enfocar la energía rápidamente en el propósito que estamos buscando conseguir.
Reconocidos autores como Mauricio Puerta, Brandy Williams, Gerina Dunwich y Vladimir Burdman, entre muchos otros, asocian la realización del circulo de encantamiento con una forma de “magia psíquica” que sincroniza nuestras capacidades para la realización de trabajos mágicos, con nuestra energía psíquica, pone ambas formas de energía a trabajar en concreto, y al cabo de algún tiempo en la práctica, gracias a la “programación neurolingüística” nos ayuda a enfocar más rápidamente nuestra conciencia en el trabajo mágico que realizamos, siendo cada vez más difícil para nosotros captar distracciones en el proceso.
Mientras Brandy Williams, autora de múltiples libros de magia y realización mágica, afirma que la programación neurolingüística es parte vital de nuestro dia a dia, y es especialmente importante para aquellos que nos dedicamos a la práctica de las artes mágicas o espiritistas, otros autores un poco más enfocados en el arte esotérico como Gerina Dunwich y Vladimir Burdman (por solo nombrar algunos y no aburrir al lector con una enorme lista), afirman que el circulo mágico es una forma de marcar y delimitar el espacio entre el área del trabajo mágico, donde se concentra la energía que usamos para el ritual, y el espacio exterior, ese que cohabitamos dia a dia, bien sea un jardín, una oficina, un salón de la casa o un pequeño rincón de nuestro departamento.
Enfocar la energía en un solo punto es sumamente importante, pues conseguimos con ello colocar todo nuestro poder mágico en un punto seguro (el hechizo, el ritual, el amuleto, etc...), pero además evitamos perturbar la energía y muchas veces además, las emociones de quienes nos rodean.
Es comprensible que muchos practicantes, especialmente aquellos con más experiencia, decidan no hacer uso de un circulo mágico, no por arrogancia, sino más bien porque su energía y experiencia es tan elevada que en muchos casos, ningún espiritu o larva proveniente de otro plano se atrevería siquiera a acercarse a perturbar su temple, pero cuando se está iniciando en la práctica, al menos durante los primeros años, yo siempre recomiendo hacer uso del circulo de proteccion y mantener la magia dentro de él.
Momento de aburrir a mis queridos lectores con un poco de Historia familiar al respecto.
Mi abuela, Maria Begena Eugenia de Castillas y Urbaneja, una sanadora común de una tribu indígena, criada dentro de una familia de sanadores a orillas del Río Arenas en Venezuela, aun a sus más de 90 años, mantiene un enorme circulo ritual realizado con piedras pintadas de roja, verde y blanco dentro de una sala de su hacienda, justamente en el unico salon de la casa que mantiene dos ventanas, una mirando al Este y otra al Oeste, y es dentro de este circulo, donde perfectamente caben dos personas acostadas, donde ella realiza sus más imponentes sanaciones y trabajos espiritistas.
Siendo mi abuela uno de mis maestros a seguir desde muy temprana edad, incluso cuando yo le preguntaba porque con tantos años de experiencia ella conservaba este enorme circulo que a mi me parecía un mal uso del espacio, más aún, tomando en cuenta que muchas veces yo mismo tuve la suerte de presenciar el uso de muchos de sus poderes fuera del circulo, como aquella vez cuando una mujer embarazada, víctima de un embrujo realizado por su propia hermana, cayó poseída sobre mi abuela e intentó morderla, actuando como un verdadero animal salvaje a plena hora del día y en el salón central de la casa, y mi abuela solo pronunció una especie de conjuro en su lengua nativa, coloque sus manos sobre la frente de la mujer, y yo vi personalmente como la mujer en cuestión cayó inmediatamente desmayada junto a mi abuela y comenzó a vomitar un liquido negro y baboso, con espuma y muy maloliente.
En esta ocasión mi abuela no tuvo necesidad (ni tiempo) de realizar un circulo mágico, esto si es verdadera magia en casos de emergencia, pero un tipo diferente de magia que muchos (por diferentes razones) no son capaces de realizar, bien sea por inexperiencia o por que sencillamente no lo han necesitado.
En varias ocasiones vi a mi abuela consagrar objetos con solo tocarlos, dentro y fuera de la casa, y aquella vez que pasamos la noche enteramente despiertos porque no parábamos de escuchar pasos sobre el tejado, ella decía “son las brujas que están brincando hasta el monte”, la verdad nunca supe si lo dijo en modo de chiste o en serio, o quizás simplemente sea parte del folklore de su pueblo, del cual desconozco mucho, pues yo me crié en la Ciudad lejos de ella, y solo le visitaba por Vacaciones unas dos veces por año.
En esa ocasión mi abuela se asomó a la puerta trasera de la casa, golpeó el suelo con su bastón tres veces, y junto con el tercer golpe, podría jurar que se escuchó un grupo, quizás de tres o cuatro personas cayendo sobre el techo inmediatamente, seguido de ello la abuela solo dijo unas palabra y señaló al monte, un monte más allá del río, visible desde las ventanas de la casa, seguido de esto, unos pasos leves se escucharon en el techo y segundos después todos los sonidos de pisadas desaparecieron, ella se fue a dormir, asumiendo que nada importante ocurrió, y a la mañana siguiente nos envió a mis primos y a mi a reparar las tejas sueltas del techo, las cuales conseguimos enteramente dobladas.
Después de esto, y de muchas otras experiencias similares en cada visita, mi madre me estaba enseñando un dia a hacer un hechizo para ayudar a mi profesora de psicología en el colegio, y me dijo detalladamente como hacer el circulo, yo lo realice pero arrogantemente respondí, “mi abuela no necesita estas cosas, porque aun lo seguimos haciendo”, supongo que es la típica actitud que tenemos los practicantes a los 13 años, supongo, pues he visto esta misma actitud en muchos otros practicantes actualmente con esa edad.
Y mi madre en esta ocasión respondió muy seriamente, sin dejar de hacer su típica sonrisa “no importa cuanto aprendas y cuanto hagas, siempre va a haber alguien más fuerte que tu del otro lado, y muchas veces ese alguien, puede sentirse tentado a molestar, así que es mejor prevenir”.
Mi madre por otro lado, quien acostumbra a pasar literalmente sus noches enteras iluminando su altar con velas y humo (humo de tabaco, no de incienso), para siempre conseguir el favor de los espíritus, cada atardecer antes de sentarse a realizar su sesión de todas las noches, extrae una pieza de tiza blanca o roja de esa vieja caja de madera sobre su altar, y procede a trazar un circulo en el suelo, alrededor de su silla, devuelve el resto de la tiza a su caja, y se sienta a encender velas, rezar, quemar salvia, fumar tabacos durante toda la noche, hasta muy adentrados en la madrugada, y siempre al finalizar, arrojaba un poco de agua sal con las yemas de sus dedos alrededor del circulo, y luego procede a borrarlo desde adentro.
Quizás soy tan precavido, pues luego de pasar una vida entera, viendo a una verdadera experta como ella, cuidándose siempre del plano espiritual, y tomando en cuenta que muchas veces ella ha tenido allí toda clase de encuentros con entidades y criaturas que no se atreve a describir, es difícil no querer tomar precauciones y advertir a otros sobre ello.
Caso similar ocurre con el uso de la Ouija, quizás para los videntes y espiritistas es mucho más fácil contactar con el plano espiritual, pero muchos requieren por diferentes razones hacer uso de una Ouija, y recordemos que la Ouija, así como la mayoría de las herramientas de adivinación, funcionan como puertas entre nuestros mundos, y cuando no se tiene la debida experiencia, es común que inconscientemente dejemos pasar alguna entidad del otro lado, pues el velo entre el plano espiritual y el plano astral, así como nuestro plano, está plagado de entidades y criaturas ajenas a nuestro conocimiento, dispuestos a saltar entre planos para crear desde un simple dolor de cabeza hasta un terrible caos, discordia, dolencias, pérdidas, muertes, y muchas otras cosas negativas que pueden añadirse a la lista.
En mis primeros libros, así como también en los libros de muchos autores, encontrarás diferentes formas y también advertencias, sobre la realización del circulo mágico, usualmente para balancear y concentrar nuestra propia energía, y simultáneamente custodiar nuestro cuerpo físico que se encuentra en esos momentos más adentrado en el plano mágico de lo habitual. En mi más reciente libro de magia práctica, que trata sobre las bolsas de amuletos y su realización, el circulo mágico cumple una función importante como protector energético, pues, mientras te encuentras realizando y consagrando un amuleto para realizar ciertos efectos mágicos en tu entorno, o en el entorno de alguien más, sería muy fácil para algún espiritu escurridizo de este u otro plano, o incluso para algunas larvas del mundo más allá del velo, cruzar a través de tu propia energía y adentrarse en el amuleto, alimentarse de tu energía y ánimo (justo lo que hacen las larvas) a través del amuleto en cuestión, y acabar ocasionando enteramente el efecto contrario al deseado.
Aunque suene ficticio para muchos, las larvas existen.
Para muchos autores y hechiceros, las larvas, mejor conocidas por muchos como larvas astrales o gusanos del velo, de acuerdo a la cultura mágica a la que perteneces, son las formas que suelen tomar unas criaturas de bajo nivel que habitan en las puertas entre los planos, se alimentan energía negativa (así como los gusanos que crecen y se alimentan en la basura), en este caso, las larvas se alimentan de malos pensamientos, rencores, temores, arrepentimientos, pesadillas, preocupaciones, no hacen más que alimentarse, y buscar alimento.
Las larvas no habitan en el plano astral, sino en los portales abiertos entre el velo y nuestro plano, y de acuerdo a los libros de metafísica, y practicamente cualquier libro de espiritismo que puedas encontrar en una librería, las larvas suelen perseguir desde su plano, a los individuos que inundan su aura o su escudo energético con preocupaciones y sentimientos negativos como los anteriormente nombrados.
Las larvas se adhieren a ti y te hacen sentir agotado, irritable, cansado, malhumorado o deprimido, una persona frecuentemente deprimida puede atraer muchas larvas y llevarlas consigo como parásitos, bien sea contagiándonos a otras personas, o simplemente dejándoles alimentarse más frecuentemente.
Estas criaturas son de tan bajo nivel que puedes simplemente erradicarlas con algo de incienso, salvia y un baño de agua con sales, pero de lo contrario, es como caminar con un enorme gusano asqueroso que está sujeto a tu cuello alimentándose de ti durante todo el dia, que no te permite sentirte descansado, y que te mantiene malhumorado, triste o cansado todo el dia y a toda hora.
Las larvas astrales no son seres precisamente inteligentes, actúan por instinto, esencialmente por hambre, y es muy frecuente que los hechiceros y magos inexpertos las atraigan cada vez que realizan algún hechizo o conjuro, pues para ellas, es una puerta abierta a un restaurante que servirá su plato favorito.
Estas desagradables criaturas se adhieren al escudo energético del individuo (el aura), y una vez allí comienzan a alimentarse, los individuos con grandes habilidades para la realización de alguna forma de magia, o los más expertos, pueden fácilmente deshacerse de ellas, gracias a que ganan con el tiempo la habilidad de purificar y alejar o llamar diferentes clases de energías y espíritus en su entorno.
Pero a menos que seas un verdadero experto en el tema, con la suficiente experiencia para poder hacer uso de esta magia sin tomar las debidas precauciones, es recomendable siempre hacer uso del circulo mágico, o como mínimo, de algun amuleto de protección lo suficientemente practico para cuidarte.
De expertos y expertos.
Muchos magos y hechiceros más experimentados te van a recomendar hacer uso de un circulo, muchos otros te van a decir que no es necesario, en mi caso, yo siempre lo voy a recomendar, respetando por supuesto las palabras de otros que en muchos casos pueden ser más experimentados que yo, y eso es respetable, pero siempre recuerda que ser una persona saludable y tomar batidos nutritivos todo el dia, no te hace inmune a la gripe de algún desconocido que pueda acercarse, y en el caso de la magia práctica, ocurre exactamente igual.
Ciertos magos tienen una fuerte forma de visualización y enfoque, pero así como en las matemáticas, es comprensible que no todos avanzamos al mismo nivel, lo que para algunos puede resultar sumamente fácil, como la proyección astral, el desdoblamiento, la levitación, o la consagración de talismanes, para muchos otros es verdaderamente difícil, y eso es normal, no debes arriesgar nuestra energía y pasar un mal rato intentando acomodar un mal efecto realizado por un conjuro que se hizo acelerados “porque no se disponía del tiempo para hacerlo bien”, solo para alimentar el ego propio y asumir que ya estamos en capacidad de realizarlo de una u otra forma.
Para mi personalmente, es de admirar que ciertas formas de magia sean sumamente fáciles para algunos de mis lectores, e incluso para algunos de mis muy contados estudiantes, por otro lado también veo que ciertas prácticas que para mi resultan verdaderamente fáciles, para otros toma un alto nivel de dificultad, a esto me refiero cuando digo que no todos estamos en el mismo nivel, ninguno está por arriba o por debajo de alguien más, todos nos encontramos en diferentes niveles de acuerdo a nuestro estudio y práctica, pero nunca esta demas tomarse dos minutos, SOLO DOS MINUTOS, para hacer las cosas y prevenir una preocupación mayor.
Las tiendas esotéricas están abarrotadas de personas buscando libros para “exorcizar” o “revertir un maleficio”, pues creen que se trata de eso, y muchas veces por pena o desconfianza hacia los vendedores más expertos, no se percatan que realmente están bajo el influjo de una simple larva o algun espiritu traviesa que se coló en su portal mientras jugaban con una Ouija o pasaban caminando tranquilamente por las puertas de algún cementerio. Algo que hubiera sido bastante fácil de prevenir, y que no les habría tomado más de dos minutos en realizar.
Para cerrar
Siendo conscientes, nadie te está obligando, no espero (ni mucho menos creo) estar ofendiendo a nadie, pero nunca esta demas prevenir, y simplemente estoy brindando un consejo, un consejo que la verdad me parece muy útil, y que además, a mí me habría servido de mucho que este consejo lo hubiesen repetido más seguido mientras crecía, pues por testarudo, muchas veces no hice caso y pague unos verdaderos dolores de cabeza por ello, especialmente a mi madre, quien era la persona que siempre venia detrás de mí, usualmente limpiando de raíz los desastres que yo hacía, muchas veces pasándose hasta la medianoche frente a su altar, buscando arreglar los constantes problemas que yo causaba, por los cuales mis amigos y yo, nos pasamos noches enteras sin poder dormir, así como días enteros de mal humor, con terribles migrañas o constantes malestares físicos.
Si tienes la opción de hacer algo bien, o hacerlo rápido, enfócate en hacerlo bien, al menos hasta que consideres, y de acuerdo a tu propia opinión, que estás preparado para hacerlo a tu manera, todos aprendemos a nuestro propio ritmo, así que no te guies por el ritmo al que avanza alguien más, toma tu tiempo para aprender y haz las cosas bien.
No es una orden, es un consejo útil que a muchos les servirá en un futuro.
Bendiciones a todos y mucha luz.
Saludos mi Tribu y abrazos de luz a todos.
El Post de hoy es realizado con el propósito de concretar mi punto de vista e insistencia constante sobre un tema importante en la magia y la hechicería, en este caso, es el uso debido del Circulo mágico, o Circulo ritual.
Bien esta no es una práctica popular, ni tampoco es obligatoria, no deja de ser recomendable, especialmente para principiantes y no iniciados en la práctica, aquellos que carecen de cierta experiencia con respecto al tema.
Es normal cuando se ha leído uno o dos libros esotéricos, creerse un experto que lo sabe todo y está preparado para todo, pues muchas veces los verdaderos practicantes del arte mágico no colocan las suficientes advertencias en sus libros, pues muchas de estas explicaciones pueden parecer a simple vista, extraídas debidamente de un libro de ciencia ficción, y debido a que muchos lectores inexpertos pueden creerlo como algo exagerado, es normal que muchos autores no coloquen las suficientes advertencias, pues si quieres que tus libros sean tomados en serio, lamentablemente debemos limitar incluso la misma realidad hasta un cierto punto.
En todos y cada uno de mis libros siempre he recomendado con notable insistencia el uso y creación del circulo mágico, usualmente con una larga y detallada explicación, e incluso en uno de mis más recientes libros “The Magical Art Of Crafting Charm Bags”, así como en los libros anteriores a este, decidí incluir para la comodidad del practicantes, diferentes formas y usos del circulo de encantamiento, incluyendo un método corto y un método completo.
En cierta ocasión alguien me contestó en alguna red social “no siempre se dispone del tiempo para fabricar un circulo mágico, muchas veces asistimos a la magia por emergencia”, pues mi punto de vista, intentando ser respetuoso al respecto, siempre se dispone del tiempo, realizar un circulo con sal o alguna hierba encantada no te va a tomar más de dos minutos, estemos claros en algo, son dos minutos, es literalmente hallar la sal, alguna hierba de proteccion, flores, o incluso una cuerda previamente consagrada que mantengas en tu altar y puedas utilizar en ciertas ocasiones, por todos los Dioses, son dos minutos!, No creo que existan excusas para decir “no disponía de dos minutos para marcar un pequeño circulo en el suelo”.
Pero como diría mi madre “cuando por pereza o arrogancia no se quieren hacer las cosas, cualquier excusa suena válida”.
Segundo, cuando se dice “hacemos magia de emergencia”, esa “magia de bolsillo” o “magia instantánea” de la cual muchos son muy seguidores ahora, entiendo que el mundo, y especialmente para los fanáticos de las series televisivas de ciencia ficción, es genial imaginar que todo a nuestro alrededor debe suceder sumamente rápido y que debemos realizar “magia instantánea” casi para cualquier cosa.
Pero a menos que estés siendo perseguido por un vampiro a mitad de la noche, no creo que ninguna emergencia merezca realizar un efecto mágico contraproducente. Un efecto mágico contraproducente es ese resultado que ocurre cuando realizas algún hechizo o encantamiento sin pensar debidamente en las consecuencias del mismo (un hechizo de amor por ejemplo), y luego este resulta tomar un efecto que no es propiamente lo que estábamos esperando, la magia siempre funciona, pero funciona de dos maneras, o funciona bien, o funciona mal, pero la energía que enviamos a nuestro alrededor siempre acabará por producir algún efecto, bien sea positivo o negativo, pero siempre resultará en algo.
Un circulo mágico funciona primordialmente como una forma práctica de protección, mantendrá la energía dentro del circulo y reutilizara tu propia energía contenida en el circulo para protegerse debidamente de energías externas, además, es una forma de enfocar rápidamente la energía sin distracciones externas, pues tu mente y tu sistema límbico entran en modo “estoy realizando un hechizo y debo centrarme”, y al cabo de algún tiempo de práctica, esto acaba resultando muy positivo, pues nos ayuda a enfocar la energía rápidamente en el propósito que estamos buscando conseguir.
Reconocidos autores como Mauricio Puerta, Brandy Williams, Gerina Dunwich y Vladimir Burdman, entre muchos otros, asocian la realización del circulo de encantamiento con una forma de “magia psíquica” que sincroniza nuestras capacidades para la realización de trabajos mágicos, con nuestra energía psíquica, pone ambas formas de energía a trabajar en concreto, y al cabo de algún tiempo en la práctica, gracias a la “programación neurolingüística” nos ayuda a enfocar más rápidamente nuestra conciencia en el trabajo mágico que realizamos, siendo cada vez más difícil para nosotros captar distracciones en el proceso.
Mientras Brandy Williams, autora de múltiples libros de magia y realización mágica, afirma que la programación neurolingüística es parte vital de nuestro dia a dia, y es especialmente importante para aquellos que nos dedicamos a la práctica de las artes mágicas o espiritistas, otros autores un poco más enfocados en el arte esotérico como Gerina Dunwich y Vladimir Burdman (por solo nombrar algunos y no aburrir al lector con una enorme lista), afirman que el circulo mágico es una forma de marcar y delimitar el espacio entre el área del trabajo mágico, donde se concentra la energía que usamos para el ritual, y el espacio exterior, ese que cohabitamos dia a dia, bien sea un jardín, una oficina, un salón de la casa o un pequeño rincón de nuestro departamento.
Enfocar la energía en un solo punto es sumamente importante, pues conseguimos con ello colocar todo nuestro poder mágico en un punto seguro (el hechizo, el ritual, el amuleto, etc...), pero además evitamos perturbar la energía y muchas veces además, las emociones de quienes nos rodean.
Es comprensible que muchos practicantes, especialmente aquellos con más experiencia, decidan no hacer uso de un circulo mágico, no por arrogancia, sino más bien porque su energía y experiencia es tan elevada que en muchos casos, ningún espiritu o larva proveniente de otro plano se atrevería siquiera a acercarse a perturbar su temple, pero cuando se está iniciando en la práctica, al menos durante los primeros años, yo siempre recomiendo hacer uso del circulo de proteccion y mantener la magia dentro de él.
Momento de aburrir a mis queridos lectores con un poco de Historia familiar al respecto.
Mi abuela, Maria Begena Eugenia de Castillas y Urbaneja, una sanadora común de una tribu indígena, criada dentro de una familia de sanadores a orillas del Río Arenas en Venezuela, aun a sus más de 90 años, mantiene un enorme circulo ritual realizado con piedras pintadas de roja, verde y blanco dentro de una sala de su hacienda, justamente en el unico salon de la casa que mantiene dos ventanas, una mirando al Este y otra al Oeste, y es dentro de este circulo, donde perfectamente caben dos personas acostadas, donde ella realiza sus más imponentes sanaciones y trabajos espiritistas.
Siendo mi abuela uno de mis maestros a seguir desde muy temprana edad, incluso cuando yo le preguntaba porque con tantos años de experiencia ella conservaba este enorme circulo que a mi me parecía un mal uso del espacio, más aún, tomando en cuenta que muchas veces yo mismo tuve la suerte de presenciar el uso de muchos de sus poderes fuera del circulo, como aquella vez cuando una mujer embarazada, víctima de un embrujo realizado por su propia hermana, cayó poseída sobre mi abuela e intentó morderla, actuando como un verdadero animal salvaje a plena hora del día y en el salón central de la casa, y mi abuela solo pronunció una especie de conjuro en su lengua nativa, coloque sus manos sobre la frente de la mujer, y yo vi personalmente como la mujer en cuestión cayó inmediatamente desmayada junto a mi abuela y comenzó a vomitar un liquido negro y baboso, con espuma y muy maloliente.
En esta ocasión mi abuela no tuvo necesidad (ni tiempo) de realizar un circulo mágico, esto si es verdadera magia en casos de emergencia, pero un tipo diferente de magia que muchos (por diferentes razones) no son capaces de realizar, bien sea por inexperiencia o por que sencillamente no lo han necesitado.
En varias ocasiones vi a mi abuela consagrar objetos con solo tocarlos, dentro y fuera de la casa, y aquella vez que pasamos la noche enteramente despiertos porque no parábamos de escuchar pasos sobre el tejado, ella decía “son las brujas que están brincando hasta el monte”, la verdad nunca supe si lo dijo en modo de chiste o en serio, o quizás simplemente sea parte del folklore de su pueblo, del cual desconozco mucho, pues yo me crié en la Ciudad lejos de ella, y solo le visitaba por Vacaciones unas dos veces por año.
En esa ocasión mi abuela se asomó a la puerta trasera de la casa, golpeó el suelo con su bastón tres veces, y junto con el tercer golpe, podría jurar que se escuchó un grupo, quizás de tres o cuatro personas cayendo sobre el techo inmediatamente, seguido de ello la abuela solo dijo unas palabra y señaló al monte, un monte más allá del río, visible desde las ventanas de la casa, seguido de esto, unos pasos leves se escucharon en el techo y segundos después todos los sonidos de pisadas desaparecieron, ella se fue a dormir, asumiendo que nada importante ocurrió, y a la mañana siguiente nos envió a mis primos y a mi a reparar las tejas sueltas del techo, las cuales conseguimos enteramente dobladas.
Después de esto, y de muchas otras experiencias similares en cada visita, mi madre me estaba enseñando un dia a hacer un hechizo para ayudar a mi profesora de psicología en el colegio, y me dijo detalladamente como hacer el circulo, yo lo realice pero arrogantemente respondí, “mi abuela no necesita estas cosas, porque aun lo seguimos haciendo”, supongo que es la típica actitud que tenemos los practicantes a los 13 años, supongo, pues he visto esta misma actitud en muchos otros practicantes actualmente con esa edad.
Y mi madre en esta ocasión respondió muy seriamente, sin dejar de hacer su típica sonrisa “no importa cuanto aprendas y cuanto hagas, siempre va a haber alguien más fuerte que tu del otro lado, y muchas veces ese alguien, puede sentirse tentado a molestar, así que es mejor prevenir”.
Mi madre por otro lado, quien acostumbra a pasar literalmente sus noches enteras iluminando su altar con velas y humo (humo de tabaco, no de incienso), para siempre conseguir el favor de los espíritus, cada atardecer antes de sentarse a realizar su sesión de todas las noches, extrae una pieza de tiza blanca o roja de esa vieja caja de madera sobre su altar, y procede a trazar un circulo en el suelo, alrededor de su silla, devuelve el resto de la tiza a su caja, y se sienta a encender velas, rezar, quemar salvia, fumar tabacos durante toda la noche, hasta muy adentrados en la madrugada, y siempre al finalizar, arrojaba un poco de agua sal con las yemas de sus dedos alrededor del circulo, y luego procede a borrarlo desde adentro.
Quizás soy tan precavido, pues luego de pasar una vida entera, viendo a una verdadera experta como ella, cuidándose siempre del plano espiritual, y tomando en cuenta que muchas veces ella ha tenido allí toda clase de encuentros con entidades y criaturas que no se atreve a describir, es difícil no querer tomar precauciones y advertir a otros sobre ello.
Caso similar ocurre con el uso de la Ouija, quizás para los videntes y espiritistas es mucho más fácil contactar con el plano espiritual, pero muchos requieren por diferentes razones hacer uso de una Ouija, y recordemos que la Ouija, así como la mayoría de las herramientas de adivinación, funcionan como puertas entre nuestros mundos, y cuando no se tiene la debida experiencia, es común que inconscientemente dejemos pasar alguna entidad del otro lado, pues el velo entre el plano espiritual y el plano astral, así como nuestro plano, está plagado de entidades y criaturas ajenas a nuestro conocimiento, dispuestos a saltar entre planos para crear desde un simple dolor de cabeza hasta un terrible caos, discordia, dolencias, pérdidas, muertes, y muchas otras cosas negativas que pueden añadirse a la lista.
En mis primeros libros, así como también en los libros de muchos autores, encontrarás diferentes formas y también advertencias, sobre la realización del circulo mágico, usualmente para balancear y concentrar nuestra propia energía, y simultáneamente custodiar nuestro cuerpo físico que se encuentra en esos momentos más adentrado en el plano mágico de lo habitual. En mi más reciente libro de magia práctica, que trata sobre las bolsas de amuletos y su realización, el circulo mágico cumple una función importante como protector energético, pues, mientras te encuentras realizando y consagrando un amuleto para realizar ciertos efectos mágicos en tu entorno, o en el entorno de alguien más, sería muy fácil para algún espiritu escurridizo de este u otro plano, o incluso para algunas larvas del mundo más allá del velo, cruzar a través de tu propia energía y adentrarse en el amuleto, alimentarse de tu energía y ánimo (justo lo que hacen las larvas) a través del amuleto en cuestión, y acabar ocasionando enteramente el efecto contrario al deseado.
Aunque suene ficticio para muchos, las larvas existen.
Para muchos autores y hechiceros, las larvas, mejor conocidas por muchos como larvas astrales o gusanos del velo, de acuerdo a la cultura mágica a la que perteneces, son las formas que suelen tomar unas criaturas de bajo nivel que habitan en las puertas entre los planos, se alimentan energía negativa (así como los gusanos que crecen y se alimentan en la basura), en este caso, las larvas se alimentan de malos pensamientos, rencores, temores, arrepentimientos, pesadillas, preocupaciones, no hacen más que alimentarse, y buscar alimento.
Las larvas no habitan en el plano astral, sino en los portales abiertos entre el velo y nuestro plano, y de acuerdo a los libros de metafísica, y practicamente cualquier libro de espiritismo que puedas encontrar en una librería, las larvas suelen perseguir desde su plano, a los individuos que inundan su aura o su escudo energético con preocupaciones y sentimientos negativos como los anteriormente nombrados.
Las larvas se adhieren a ti y te hacen sentir agotado, irritable, cansado, malhumorado o deprimido, una persona frecuentemente deprimida puede atraer muchas larvas y llevarlas consigo como parásitos, bien sea contagiándonos a otras personas, o simplemente dejándoles alimentarse más frecuentemente.
Estas criaturas son de tan bajo nivel que puedes simplemente erradicarlas con algo de incienso, salvia y un baño de agua con sales, pero de lo contrario, es como caminar con un enorme gusano asqueroso que está sujeto a tu cuello alimentándose de ti durante todo el dia, que no te permite sentirte descansado, y que te mantiene malhumorado, triste o cansado todo el dia y a toda hora.
Las larvas astrales no son seres precisamente inteligentes, actúan por instinto, esencialmente por hambre, y es muy frecuente que los hechiceros y magos inexpertos las atraigan cada vez que realizan algún hechizo o conjuro, pues para ellas, es una puerta abierta a un restaurante que servirá su plato favorito.
Estas desagradables criaturas se adhieren al escudo energético del individuo (el aura), y una vez allí comienzan a alimentarse, los individuos con grandes habilidades para la realización de alguna forma de magia, o los más expertos, pueden fácilmente deshacerse de ellas, gracias a que ganan con el tiempo la habilidad de purificar y alejar o llamar diferentes clases de energías y espíritus en su entorno.
Pero a menos que seas un verdadero experto en el tema, con la suficiente experiencia para poder hacer uso de esta magia sin tomar las debidas precauciones, es recomendable siempre hacer uso del circulo mágico, o como mínimo, de algun amuleto de protección lo suficientemente practico para cuidarte.
De expertos y expertos.
Muchos magos y hechiceros más experimentados te van a recomendar hacer uso de un circulo, muchos otros te van a decir que no es necesario, en mi caso, yo siempre lo voy a recomendar, respetando por supuesto las palabras de otros que en muchos casos pueden ser más experimentados que yo, y eso es respetable, pero siempre recuerda que ser una persona saludable y tomar batidos nutritivos todo el dia, no te hace inmune a la gripe de algún desconocido que pueda acercarse, y en el caso de la magia práctica, ocurre exactamente igual.
Ciertos magos tienen una fuerte forma de visualización y enfoque, pero así como en las matemáticas, es comprensible que no todos avanzamos al mismo nivel, lo que para algunos puede resultar sumamente fácil, como la proyección astral, el desdoblamiento, la levitación, o la consagración de talismanes, para muchos otros es verdaderamente difícil, y eso es normal, no debes arriesgar nuestra energía y pasar un mal rato intentando acomodar un mal efecto realizado por un conjuro que se hizo acelerados “porque no se disponía del tiempo para hacerlo bien”, solo para alimentar el ego propio y asumir que ya estamos en capacidad de realizarlo de una u otra forma.
Para mi personalmente, es de admirar que ciertas formas de magia sean sumamente fáciles para algunos de mis lectores, e incluso para algunos de mis muy contados estudiantes, por otro lado también veo que ciertas prácticas que para mi resultan verdaderamente fáciles, para otros toma un alto nivel de dificultad, a esto me refiero cuando digo que no todos estamos en el mismo nivel, ninguno está por arriba o por debajo de alguien más, todos nos encontramos en diferentes niveles de acuerdo a nuestro estudio y práctica, pero nunca esta demas tomarse dos minutos, SOLO DOS MINUTOS, para hacer las cosas y prevenir una preocupación mayor.
Las tiendas esotéricas están abarrotadas de personas buscando libros para “exorcizar” o “revertir un maleficio”, pues creen que se trata de eso, y muchas veces por pena o desconfianza hacia los vendedores más expertos, no se percatan que realmente están bajo el influjo de una simple larva o algun espiritu traviesa que se coló en su portal mientras jugaban con una Ouija o pasaban caminando tranquilamente por las puertas de algún cementerio. Algo que hubiera sido bastante fácil de prevenir, y que no les habría tomado más de dos minutos en realizar.
Para cerrar
Siendo conscientes, nadie te está obligando, no espero (ni mucho menos creo) estar ofendiendo a nadie, pero nunca esta demas prevenir, y simplemente estoy brindando un consejo, un consejo que la verdad me parece muy útil, y que además, a mí me habría servido de mucho que este consejo lo hubiesen repetido más seguido mientras crecía, pues por testarudo, muchas veces no hice caso y pague unos verdaderos dolores de cabeza por ello, especialmente a mi madre, quien era la persona que siempre venia detrás de mí, usualmente limpiando de raíz los desastres que yo hacía, muchas veces pasándose hasta la medianoche frente a su altar, buscando arreglar los constantes problemas que yo causaba, por los cuales mis amigos y yo, nos pasamos noches enteras sin poder dormir, así como días enteros de mal humor, con terribles migrañas o constantes malestares físicos.
Si tienes la opción de hacer algo bien, o hacerlo rápido, enfócate en hacerlo bien, al menos hasta que consideres, y de acuerdo a tu propia opinión, que estás preparado para hacerlo a tu manera, todos aprendemos a nuestro propio ritmo, así que no te guies por el ritmo al que avanza alguien más, toma tu tiempo para aprender y haz las cosas bien.
No es una orden, es un consejo útil que a muchos les servirá en un futuro.
Bendiciones a todos y mucha luz.